Dentro de las grandes urbes existen espacios mínimos para escapar del caos rutinario y refugiarse entre zonas verdes para respirar, desconectar y poder seguir adelante.
A esto se añaden los múltiples estragos que ha ocasionado la sobrepoblación en el planeta, hecho que invita a pensar, de manera urgente, en alternativas sostenibles para cuidar los recursos renovables del planeta, lo cual inexorablemente contribuirá a un estilo de vida mucho más pleno.
Conectarse con la naturaleza: privilegios que suman vida
No hace falta ser un erudito para constatar los innumerables beneficios de la naturaleza para el ser humano. Sólo basta hacer la prueba de escapar durante un fin de semana, a caminar por un lugar colmado de paisajes verdes donde se respire aire puro y comprobar cómo tras unos minutos, el organismo retoma su centro y una especie de serenidad hace que los individuos se sientan más plenos.
La razón es que se minimiza casi al completo todo el estrés. De la misma forma se disminuye la posibilidad de padecer una enfermedad mental.
A eso se suman otras ventajas más que importantes, como:
- Desarrollar mecanismos de protección del sistema inmunológico.
- Reducir el riesgo de sufrir enfermedades como hipertensión arterial o diabetes.
- Para los niños es mucho más que beneficioso porque los mantiene alejados del sedentarismo, así como una reducción del Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad.
Premisas para el siglo XXI: abogar por la defensa del desarrollo sostenible
Es alentador encontrar páginas web con información valiosa sobre el cuidado del medioambiente y mecanismos en función del desarrollo sostenible. En Horizonte2030 la premisa es abogar por un mundo sostenible, el cual permita un crecimiento equitativo para toda la población.
Se trata de difundir la cultura del reciclaje y la producción equilibrada de la materia prima, para que todos tengan acceso a ella. De ahí que se destaquen los siguientes objetivos:
- Consumo mesurado de los recursos naturales renovables y no renovables.
- Concienciar a la población en general, en relación con los efectos irreversibles al no preservar los bosques, los océanos y toda la fauna que vive en el planeta.
- Con estas acciones es posible sumar, en preservar el planeta y garantizar la calidad de vida por muchos años más.
La defensa del agua como un bien para la humanidad
La fecha del 22 de marzo está muy cerca y en esta página medioambiental se quiere hacer eco de la importancia del agua para procurar la calidad vida de todos los que habitan el planeta Tierra a propósito del Día Mundial del Agua.
Pero es lamentable que cada día sean más los lugares donde habitan humanos que sufren y se convierten en poblaciones vulnerables, producto de la escasez del agua, ya que como recurso natural puede llegar a su fin de no cuidarse.
Es tan fácil dar por sentado ciertas cosas como abrir el grifo y disponer de agua a toda hora, pero parece muy difícil no tener conciencia y procurar acciones para evitar la contaminación de este vital elemento.
Es preciso reiterar el valor del agua para todas las sociedades:
- Es vital para la subsistencia del ser humano.
- Garantiza la producción industrial y los cultivos, así como la realización de las tareas cotidianas.
- Es necesaria para procurar la higiene diaria de los individuos.
Proteger el hogar y el medioambiente sí es posible
Ciertos insectos causan grandes daños en la estructura interna y externa del hogar, y son tan resistentes, que acabar con estas plagas resulta muy complicado.
Por eso, la tarea de eliminar las termitas es difícil y lo es mucho más cuando se quiere impedir que tenga efectos negativos en el medioambiente. No obstante, existen ciertos productos que garantizan la eficacia de la operación que no ocasionan efectos contraproducentes en el medioambiente.
Es el caso de los cebos instalados alrededor del inmueble del cual se quiera erradicar esta cruenta y silenciosa plaga.
¿Cómo ocurre su aniquilación?
Con la instalación de cebos a ras del suelo cercanos al lugar donde se precisa erradicar a las termitas. También es posible realizarlo en el interior de una vivienda o local. Simplemente se coloca una caja. Esta modalidad garantiza la eliminación al cabo de un año.