En un centro de rehabilitación se puede conseguir la ayuda necesaria hoy en día para dejar atrás la dependencia a las drogas o al alcohol, y finalmente, conseguir la paz mental. Uno de los más reconocidos en España es el Centro de Desintoxicación y Rehabilitación de Drogas y Vivienda de Apoyo al Tratamiento del Grupo Neros, con sus dos sedes en Sevilla y Asturias.
La adicción al alcohol o a las drogas es una condición que afecta al bienestar físico y mental de la persona que lo sufre. Es una situación en la que se desarrolla una dependencia a la sustancia que puede llegar a ser fatal. Según la ONU, en 2017 hubo 585.000 fallecidos a causa del consumo de drogas.
En cuanto a la adicción al alcohol, fueron 3 millones las personas fallecidas, según un informe de la ONU de 2016. Tales cifras dan cuenta de porqué es tan importante tratar las adicciones sobre cualquier sustancia, pues afectan poco a poco a un individuo hasta destruirlo completamente.
Afortunadamente, existen tratamientos para eliminar estas dependencias y rehabilitar a la persona adicta, permitiendo su reinserción en la sociedad de una manera sana y digna. Éstos pueden realizarse en un centro de rehabilitación, donde la persona se queda interna por la cantidad de tiempo necesaria. Allí se realizará el proceso de desintoxicación, además de terapias psicológicas para que pueda dejar las drogas o el alcohol.
El Centro de Desintoxicación y Rehabilitación de Drogas y Vivienda de Apoyo al Tratamiento del Grupo Neros es uno de los sitios de mayor referencia en el país, y cuenta con dos sedes, en Sevilla y Asturias. Su personal lo integran terapeutas profesionales, expertos en la erradicación de adicciones de todo tipo.
Su novedosa metodología de trabajo permite influenciar en la conducta del paciente, reemplazando los hábitos dañinos por otros positivos. De este modo, se elimina la necesidad compulsiva de consumir bebidas o drogas, permitiendo que la persona pueda volver a desarrollar su vida correctamente.
Atención humana y de alta calidad
Ya sea porque se quiere llevar a un ser querido que sufre adicción, o que uno mismo sea dependiente al alcohol o a las drogas, y quiera apartarse de ello, la selección del centro de desintoxicación de drogas resultará esencial para verdaderamente notar una mejoría. En el Centro de Desintoxicación y Rehabilitación de Drogas y Vivienda de Apoyo al Tratamiento utilizan un complejo sistema basado en terapias grupales para conseguirlo.
El proceso que desarrollan en este centro se puede resumir en cuatro pasos: desintoxicación, deshabituación, rehabilitación y reinserción. Este método de trabajo ha demostrado ser bastante efectivo, y es el que ha sido aplicado por este centro, durante sus diez años de experiencia.
Sus instalaciones son cómodas e higiénicas, y ofrecen todas las garantías sanitarias, y es que antes de escoger un centro de rehabilitación, este último es uno de los principales aspectos que se debe revisar. Es importante visitar el lugar antes de empezar el tratamiento, para revisar sus salas de estar, habitaciones, baños, entre otros aspectos.
Hay que recordar que una adicción es un asunto complicado, requiere especialistas de diversos ámbitos para poder erradicarla. En el Centro de Desintoxicación y Rehabilitación de Drogas y Vivienda de Apoyo al Tratamiento trabajan expertos en psicología clínica y psiquiatría, además de trabajadores sociales y educadores sociales. Este centro cuenta con un equipo profesional y multidisciplinario.
Todo el personal está articulado para atender de manera correcta a los pacientes, basándose en un tratamiento a nivel cognitivo conductual. Se puede encontrar más información acerca del tratamiento y las terapias que aplican en su sitio web.
Otros aspectos a revisar antes de seleccionar
Son varios los aspectos a tener en cuenta al elegir un centro de rehabilitación, uno de ellos es la ubicación. Se recomienda que el lugar esté fuera de la zona de confort del paciente, que sea un sitio aislado y tranquilo. Sin embargo, se recomienda que el lugar no esté tan alejado, esto en el caso de que por alguna circunstancia personal o de emergencia, algún conocido que se encuentre cerca pueda ayudar.
La capacitación del equipo no es lo único relevante a la hora de juzgarlos. Es importante también determinar si son agradables o no, pues la rehabilitación es un momento difícil, y durante el proceso, se necesitará una sensación de compañerismo que sea familiar.
Es importante revisar qué impresión dan los empleados al acudir por primera vez al lugar. También se pueden buscar personas que ya hayan pasado por el centro y preguntarles por sus experiencias.
Hay que evitar aquellos centros que no sean claros con los tratamientos que aplican en sus pacientes. Un buen centro, como el ya indicado, utiliza terapias con evidencia científica que las sustentan, y ofrecen información sobre las mismas a los clientes para lograr transparencia.
¿Por qué acudir a un centro de rehabilitación?
Algunas personas no han tomado conciencia de la necesidad de pasar un tiempo dentro de un centro de desintoxicación, pues consideran que pueden dejar su adicción por ellos mismos. Nada más alejado de la realidad.
La verdad es que una adicción es una enfermedad grave y se necesita ayuda externa para poder vencerla. En un centro de rehabilitación, como es el caso del Grupo Neros, se puede obtener esta ayuda, además de otros beneficios que serán esenciales para obtener la tan ansiada sobriedad.
Entre éstos se encuentran los siguientes:
- Supervisión y apoyo durante las 24 horas del día: el personal estará al tanto del paciente durante toda su permanencia. Lo que se busca es ser un pilar para la persona, pues sufrirá de abstinencia y necesitará ayuda emocional durante estos momentos. De esta manera, se podrán evitar las recaídas.
- No hay acceso a drogas ni alcohol: el centro siempre está libre de sustancias adictivas, para evitar que los pacientes puedan acceder a ellas en momentos de tentación. Es una medida esencial para no romper la racha de sobriedad, por pequeña que sea, pues durante la terapia cada día libre de alcohol o drogas es un logro.
Nuevas amistades: durante las terapias grupales se conocerá a una gran cantidad de personas, quienes habrán pasado por experiencias similares con el problema de la adicción. Al intercambiar historias de vida, se podrá desarrollar nuevas amistades y así formar una red de apoyo que se sentirá como una segunda familia. Esto resultará esencial para conseguir ayuda emocional y ánimos para continuar con una vida de sobriedad.