Se aproxima el invierno, la época en que dedicamos más tiempo a actividades de ocio en nuestras casas como ver la televisión, leer o explorar la tragaperras con bonos que más te guste. Sin embargo, el frío también nos obliga a tomar medidas esenciales para nuestro confort y por eso aquí te dejamos unos buenos consejos para proteger tu casa del frío.
Revisar los aislamientos de la casa
Según los expertos, casi la totalidad de las viviendas en nuestro país presentan fugas innecesarias de calor. Para evitar esta costosa falla, se recomienda detectar los ‘puntos fríos’. Se debe poner especial atención a que las ventanas y puertas encajen y cierren correctamente.
Una solución económica y rápida son las tiras de aislamiento y sellado. También, si está dentro de tu presupuesto, puedes reforzar tu vivienda con dobles ventanas. Estas, además de protegerte del frío, son igualmente buenos aislantes del ruido.
Aprovechar las horas de sol
Definitivamente nuestra principal fuente de calor es el sol, pues definitivamente un poco de vitamina D siempre nos beneficia a la salud. Por ello, es recomendable aprovechar las horas de sol para calentar nuestra vivienda. A primeras horas de la mañana, abre las ventanas y sube las persianas para que las habitaciones se ventilen.
Después, cierra las ventanas para que el cristal se caliente. Y, conforme el sol se vaya poniendo, baja las persianas para impedir que el frío y la humedad entren. No solo ahorrarás dinero, sino que también tu salud saldrá muy beneficiada.
Usa tus alfombras más calentitas
Para hacer más confortable nuestra vivienda en invierno podemos recurrir a las alfombras. Sí: además de decorar, las alfombras también pueden retener muy bien el calor si son del material adecuado.
Ponlas en los lugares donde más tiempo estés, como en el salón junto al sofá. También puedes colocar una en el dormitorio, al lado de la cama. Pero igualmente puedes adaptar toda la decoración a la temporada, añadiendo cortinas de tejidos cálidos y cojines de terciopelo.
Revisar la caldera y los radiadores
Algo que no debes olvidar es el mantenimiento de los electrodomésticos. Por ejemplo, las calderas y radiadores en mal funcionamiento no solo consumen más energía, sino que también pueden generar un accidente. Así que te aconsejamos revisar la presión de la caldera, que debe estar entre 1 y 1,5 bares.
Cuando está por debajo de 0,5 es porque algo no anda bien y debes llamar a un especialista. Y nunca enciendas la calefacción sin antes cerciorarte de que el agua circula adecuadamente por los radiadores.
Ojo con la calefacción
Para finalizar, ten presente que en invierno debes moderar la calefacción. Si bien hace más confortable la casa en los días fríos, también puede causar problemas de salud. De tal manera que debes evitar los cambios bruscos de temperatura. El nivel aconsejable son 20 grados. Esto permite crear un ambiente agradable al tiempo que ahorras energía.
Si cumples estos consejos pasarás un invierno en un ambiente muy calientito y acogedor. También puedes comprar un programador para que la calefacción se encienda solo cuando estás en casa. Otra buena idea es utilizar ropa abrigada.