Lo que le falta a esta planta en popularidad, lo compensa con ocasiones. La planta Hebe es una especie que medra en arbustos con más de noventa variedades diferentes, impresionantemente resistentes. Se trata de una planta de floración larga, que requiere pocos cuidados en las condiciones apropiadas y que es muy afable con las abejas.
Tal vez asimismo te pueda interesar: Enredaderas, arbustos y flores moradas para bordes
Cada cultivar de planta Hebe tiene hojas únicas que cambian en color desde el verde obscuro hasta el violeta y el rosa. Puedes cultivarla de forma directa en el suelo, en una cama elevada o en una maceta; aun, en torno a los bordes, como seto de bajo desarrollo o como planta cubresuelos.
Variedades de Hebe para cultivar
- Hebe Gran Orme: este arbusto resistente tiene hojas en forma de lanza y son larguísimas. Las flores son rosadas y se mantienen en racimos ahusados. Este género de hebe es ideal para plantar a lo largo de la temporada de otoño y verano.
- Hebe Nubes Azules: esta pluralidad con follaje de color verde obscuro y en forma de lanza, se torna de color purpura obscuro cuando el tiempo se vuelve fresco.
- Hebe Nicola: las hojas de esta planta son de color verde medio con los bordes colorados. Sus flores son de color rosa pálido y a lo largo del invierno desarrollan tintes morados.
¿De qué forma hacer medrar a la planta Hebe?

Si bien la planta Hebe no es muy puntillosa con el suelo, se aconseja utilizar uno húmedo y con buen drenaje. Los suelos riquísimos en nutrientes pueden provocar un desarrollo laxo, por lo que es preciso prepararlo ya antes de plantar. Por otra parte, es preciso que la cultives en un sitio protegido del sol pleno, puesto que la mayor parte de las especies aceptan el sol parcial. Una genial opción sería la de plantar el Hebe cerca de una pared orientada al oeste o al sur.
El instante ideal para plantar Hebe es a fines de la primavera.
Si vas a cultivar una planta establecida, cava un hoto que sea tan ancho y profundo como la maceta que has comprado. Retira la planta, aflojando suavemente las raíces y pone el cepellón en el hoyo, asegurándote que la parte superior del mismo se asiente a exactamente la misma profundidad que tenía en la maceta. Rellena con tierra y riega hasta el momento en que se establezca.
Si vas a cultivar Hebe en macetas, llénalas con tierra y asegúrate de ponerlas en áreas donde les de el sol parcial. Riégalas a lo largo de su primera temporada de desarrollo y una vez que esta finalice, las Hebe comenzarán a desarrollar raíces que se extenderán a través del suelo en la maceta.

Propagación de la planta Hebe
- Retira un brote de un tallo sin flores. Cerciórate de que este tallo esté sano y libre de plagas y enfermedades.
- Quítales las hojas cerca de la parte inferior del corte.
- Prepara una maceta pequeña con una mezcla de compost sin turba. Si lo prefieres, puedes sumergir el extremo del tallo cortado en hormonas de enraizamiento.
- Una vez plantado el esqueje, riega bien y cubre con una bolsa plástica. Esto va a ayudar a retener la humedad y promover un nuevo desarrollo.
Cuidado de la planta Hebe
Aparte de regar a fin de que la tierra se sostenga húmeda y podar la planta anualmente, deberás retirar las flores fallecidas hasta 1/3 una vez que comiencen a mustiarse. Las flores fallecidas te van a ayudar a fomentar una floración intensa para la próxima temporada. Asimismo puedes podar a fines del verano para sostener la manera y alargar la vida útil de la planta.
Evita fertilizar la planta, ya que esto puede hacer que medren demasiado veloz y el follaje continúe enclenque. La vida de las Hebe en general es de cinco a diez años como máximo.